¿Alguien más tiene una idea o proyecto que siente que va a ser increíble pero no ha hecho?
Yo sí.
Tengo miles de ideas y proyectos que me paran los pelos de punta y siento que me pueden cambiar la vida, pero no los hago. Me dan miedo o no me quiero arriesgar.
Estamos en el mismo equipo, ¿verdad? A ustedes también les pasa.
Y tenemos la mejor compañía posible:
La gente que ha hecho cosas épicas tenía miedo de hacerlas. Creían que no eran suficientemente buenas o sentían que el riesgo era muy grande.
La gente que ha hecho cosas épicas en la vida no se despertaron un día y mágicamente tenían poder de voluntad y mágicamente tenían un montón de habilidades de Project Management y mágicamente tenían un montón de motivación.
La gente que sabemos que ha hecho cosas increíbles han tenido que ser empujados a actuar.
Hoy vemos las cosas que hicieron y las vemos increíble, las vemos como que obviamente esas personas las iban a hacer, pero ellos—en ese momento—creían que probablemente no iban a funcionar.
Adam Grant, en su libro Originals, expone la idea de que ser creativo y ser proactivo no son compatibles con el mundo en que vivimos en que nos gusta que todo siga un orden y una estructura. Hacer algo increíble, casi que por definición, significa ir en contra de ese orden y esa estructura.
Por ejemplo, el Declaration of Independence de Estados Unidos, que creó lo que podemos argumentar es la economía y el país más poderoso del mundo, casi no llega a suceder. John Adams quería ser político y le daba mucho miedo que hubiera retribución de parte de Inglaterra y que no le fuera bien en sus negocios y aspiraciones políticas. George Washington estaba en su granja feliz sembrando y criando ganado y no quería arriesgar eso para algo tan loco como levantarse en armas en contra del poder mundial del momento. La gente los eligió en contra de su voluntad y ese voto de confianza los empujó a hacerlo.
Martin Luther King tenía otro discurso preparado para Washington en 1963 porque sus consejeros habían decidido que el discurso de "I Have a Dream" era muy cursi y que no iban a tomar en serio su mensaje. No fue sino hasta que estuvo frente al podio y que oyó a la cantante Mahalia Jackson decirle "tell them about the dream, Martin" que King se dejó convencer de dar el discurso icónico que todos conocemos y que fue un punto clave en la lucha de derechos humanos.
El proceso de crear cosas increíbles incluye no saber si esas cosas van a ser increíbles. El proceso de crear cosas increíbles incluye que nos de miedo y que evitemos ejecutarlas. Es parte del proceso.
Steven Pressfield, en su libro The War of Art, define una presencia o sentimiento llamada "La Resistencia" que sólo sale cuando estamos a punto de hacer algo increíble e importante y nos hace resistir a hacerlo. Es natural, dice Pressfield, a todos nos sale.
De hecho, ¡La Resistencia sólo se presenta cuando vamos a hacer cosas importantes! Entonces sentir miedo, sentir riesgo y sentir bloqueos es un indicador de que tenemos algo increíble en las manos.
Greta Gerwig quiso ser directora desde que dirigió una obra en 7mo del colegio, pero sus compañeros la marcaron de "mandona" y "estricta" y la inseguridad de esos juicios la hicieron abandonar ese sueño. Entró al mundo de Hollywood siendo actriz. Conoció a la directora Sally Potter que directamente le dijo que se notaba que ella quería dirigir pero le daba miedo preguntar y la convenció de hacer las preguntas, de aprender y de lanzarse al mundo de la dirección.
Como directora, Gerwig ha ganado 7 premios con Lady Bird, Little Women y Barbie.
J.R.R. Tolkien era profesor en University of Oxford cuando estaba escribiendo The Lord of the Rings. En ese momento el género de fantasía no se consideraba "serio" y él siendo profesor de una universidad prestigiosa sentía que iba a sacrificar su reputación y carrera si sacaba el libro. No fue sino hasta que su amigo, el famosísimo C.S. Lewis, lo convenció de terminarlo que decidió seguir con el proyecto.
The Lord of The Rings ha vendido más de 600 millones de copias y Tolkien tuvo que ser convencido de sacarlo.
Somos humanos y necesitamos la seguridad y apoyo moral de que alguien más crea en nosotros para poder hacerlos. La Resistencia se puede vencer en equipo.
Estos ejemplos que les he dado son ejemplos de personas que han tenido que ser empujados para hacer algo increíble, pero ¿cuántas otras personas tenían cosas increíbles que nunca se ejecutaron, que nunca vieron la luz porque nadie los empujó?
Yo concluyo 2 cosas:
Seguimos siendo personas valiosas aunque esa idea o proyecto nunca salga. Además, que no ejecutar hoy no es un indicador de que no vamos a ejecutar en el futuro.
Deberíamos de rodearnos de personas que puedan decirnos:
"Yo creo en usted y el mundo merece el valor que ese proyecto puede generar."
Es probable que dentro de nuestros amigos y nuestra familia no encontramos ese tipo de personas porque a ellos les da más miedo que a nosotros mismos. Hacer cosas épicas, en sus ojos, es correr riesgo — y eso les da miedo.
Tal vez las personas que nos empujan a hacer cosas increíbles son personas que están alejados a un grado de distancia.
Son personas que conocemos en el trabajo, que nos han visto trabajar, que ven nuestras habilidades, que no nos ven más que un bebé que tiene que ser defendido.
Tal vez son una pareja que cree en nosotros y que quiere construir una vida épica en conjunto.
Tal vez es nuestra audiencia. Las personas que ya nos han escuchado hablar y que creen en lo que hacemos y que hasta nos dicen "yo necesito que usted haga eso porque yo tengo el problema que usted resuelve".
Si están leyendo esto hoy, probablemente tienen una idea o varias que no están ejecutando por miedo. O porque no creen que sea tan buena idea o porque nadie los ha empujado a hacerlos.
Y eso está bien. Eso nos pone en el mismo grupo de Tolkien, Washington, Gerwig, King Jr., etc.
No ejecutar está bien, pero el mundo no se hace más épico si nadie ejecuta sus ideas y proyectos.
Si ustedes sí quieren ejecutar, lo mejor que pueden hacer es rodearse de gente increíble con la que van a ganarle a La Resistencia. Rodéense de gente que va a escuchar sus ideas malas y les va a decir "esa no", y va a escuchar sus ideas buenas y les va a decir "hágalo, yo creo en usted".
Yo creo en ustedes.
Yo creo que ustedes deberían de sacar al mundo esa cosa que todavía no han sacado. Yo creo que ustedes tiene un discurso tan grande como el de "I have a dream". Yo creo que ustedes tienen un documento tan importante como la Declaración de Independencia de Estados Unidos.
Yo creo que ustedes tienen un disco, un libro, un emprendimiento que les puede cambiar la vida a ustedes y a muchas otras personas.
Déjense convencer.
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Gracias por leer. Realmente hace una diferencia. Mi meta es ayudar a 5,000 personas a hacer tomar acción en su diseño de vida y sus proyectos profesionales. El año pasado logré apoyar a 1,890 personas a través del newsletter, 300 personas a través de recursos gratis y 217 personas a través de mis talleres, cursos y productos digitales.
